CAPITULO 7

Telf.: Blanca? – ese era mi nombre real – Eres tú? – Dios mío casi había olvidado mi lengua materna!!!

M: Si? Quién es?

Tlf: Soy...

M: Vane?? Eres tú???

V: Sí soy yo… Melania me dio tu teléfono. No la vayas a reñir, me dijo que cuando te enteraras no la volverías a hablar… En serio te digo que es un tema muy serio…

M: Que ocurre?? Por favor dime que es lo que pasa!!

V: Tendrías que volver a España cuanto antes… si pudiera ser mañana por la mañana mucho mejor. Verás… Es Mar. Anoche… Sufrió un accidente… -no la pude dejar terminar y rompí a llorar. – Lo siento, siento tanto ser yo la que te de la noticia… pero nadie se atrevía a llamarte!! Pero te busqué como pude y al fin di con Mela y le conté el problema y ella enseguida me dijo que podía contactar contigo.

M: No te preocupes, mañana mismo estoy ahí.

Al colgar el teléfono me quedé en silencio. La habitación parecía que se me hacía cada vez más grande y la imagen de la que había sido durante años mi gran amiga y confesora de todo lo que me había ocurrido desde el accidente, se me repetía en la mente. Recogí un par de cosas y las metí en la maleta. Me fui para el trabajo y hablé con mi jefe, que la verdad fue súper comprensivo.

M: Muchas gracias Thomas. De veras que pido las vacaciones adelantadas por obligación… Era una de las personas más importantes en mi vida. Hizo tanto por mí… se lo debo.

T: No me tienes que dar explicaciones. Eres, sino la mejor, una de las mejores empleadas jefes que he tenido y… yo sí que te lo debo. Tomate los días que necesites, de veras.

Al salir de allí me fui directa al aeropuerto y desde allí llame a Bill: